Con el advenimiento del Niño Dios, cada 24 de diciembre, reverdecen en nuestros corazones el amor, la esperanza y la fe. Por eso, desde la más profunda devoción cristiana, la Navidad representa para nosotros un tiempo de unión, reflexión y de paz que nos invita a emular la sencillez, bondad y humildad del Padre Redentor: el de los pobres de la tierra, los más desposeídos, los más necesitados… El que inspirado por nobles sentimientos y espíritu de sacrificio, descendió de las alturas para la protección y salvación de su pueblo.

Esta noche brillará en el firmamento la sublime estrella de su omnipotencia y omnipresencia, iluminando cada hogar de este mundo donde residan las almas buenas. Desde ese sagrado y venerado ejemplo, las y los soldados de la Patria de Bolívar estamos llamados a renovar el ímpetu de lucha por el bien común, del prójimo, del colectivo; reafirmando en tiempo presente el compromiso de elevar los esfuerzos para construir un mundo más justo, sensible y humano.

Hoy, colmados de entusiasmo y optimismo, elevamos nuestras más fervientes plegarias al Supremo Creador para que nos siga bendiciendo y acompañando en las complejas batallas por mantener el sosiego, la paz y la seguridad de esta victoriosa República. En la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, apostamos al reencuentro, al entendimiento y a la reconciliación nacional, pues solo en justa armonía podremos alcanzar la suprema felicidad social que merece nuestro pueblo.

¡FELIZ NAVIDAD, VENEZUELA!

¡Chávez Vive!… ¡La Patria sigue!

¡Independencia y Patria Socialista!… ¡Viviremos y Venceremos!

¡El Sol de Venezuela nace en el Esequibo!

¡Independencia o Nada!… ¡Leales Siempre…Traidores Nunca!

Caracas, 24 de diciembre de 2022

Vladímir Padrino López

General en Jefe