Mensaje del GJ Vladimir Padrino López, con motivo del 8vo. Aniversario de la Siembra del Comandante Supremo Hugo Chávez
El paso sigiloso e indetenible del tiempo hoy evoca en la memoria colectiva aquel infausto instante cuando el invicto soldado, forjador de Patria, compañero de la causa revolucionaria y precursor de la esperanza de los humildes, infelizmente había partido de este mundo. Y es que el 5 de marzo de 2013, el Comandante Hugo Chávez trascendió a un plano sempiterno y más sublime: el de la consciencia y el corazón palpitante de su pueblo. De allí que, la inédita e intempestiva sensación de vacío que asedió a una multitud desolada y desató su incontenible llanto, no lograse quebrantar su voluntad de lucha e indomable determinación de defender sus esenciales conquistas: la independencia y la soberanía nacional.
Desde entonces, el salto a la inmortalidad del Arañero de Sabaneta tomó la forma de un compromiso de lealtad superior, cuando su militancia asumió –con admirable consagración– su legado más preciado: el humanismo, la solidaridad, la justicia social, el bien común, la dignidad y el resguardo de la paz; principios que se han convertido en los estandartes que enarbola con sumo orgullo la Revolución Bolivariana.
Oportuno es recordar que con Chávez renació la República y todo bajo su consigna rebelde floreció; fue gracias a este Gigante que se logró rescatar el honor militar, refundando a nuestra institución armada en su carácter bolivariano, popular, antiimperialista y antioligárquico. Él es y será por siempre, ejemplo insigne y perenne de valentía y moral; el hombre que despertó el espíritu libertario de Venezuela y que sembró en ella una conciencia política que antepone el bienestar colectivo sobre el individual; el impetuoso guerrero que honró a los más desposeídos, devolviéndoles el poder para enfrentar la opresión auspiciada por el capitalismo; el impertérrito combatiente que ofrendó su existencia a la Nación.
El mejor homenaje a su ideario latente y vivo, es continuar batallando por acrisolar la magnífica obra de Bolívar, la cual tomó como suya y que hoy defendemos hasta con la propia vida: la gloria de la libertad.
¡Chávez vive!… ¡La Patria sigue!
¡Independencia y Patria Socialista!… ¡Viviremos y venceremos!
¡Independencia o nada! ¡Leales siempre!… ¡Traidores nunca!
¡El Sol de Venezuela nace en el Esequibo!
Caracas, 5 de marzo de 2021
VLADIMIR PADRINO LÓPEZ
General en Jefe